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esta altura es difícilmente una noticia propiamente dicha para nadie: El pasado 9 de Julio nevó sobre la ciudad de Buenos Aires por primera vez en casi 100 años. La nieve aparentemente venía cargada de alguna especie de alucinógeno que se absorbía por los ojos, porque el nivel de pelotudez normal en la gente se vio amplificado de manera dramática; empezando por la gente que salió a festejar a la calle como si su país hubiese vencido en la batalla definitiva contra una invasión extraterrestre, y siguiendo por los medios de comunicación que no hablaron de otra cosa en todo el día.
¡Wiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!
Click para ver más fotos en flickr.com
Para ampliar una noticia pedorra como ésta, vamos a optar por una fuente convenientemente pedorra, Infobae:
Todo el ingenio de la gente ante un fenómeno inusual. Con el torso desnudo y bronceador; con tablas de snowboard o con originales cánticos, los habitantes de la Ciudad y el Conurbano sacaron a relucir sus ocurrencias frente a la imprevista nevada. Los canales de televisión reflejaron durante todo el día lo que ocurrió con el fenómeno climático. A los usuales e improvisados muñecos totalmente de copos y las inocentes batallas con proyectiles de hielo, esta vez se sumaron un sinfín de simpáticas acciones. [...] El episodio más cómico ocurrió cuando un joven con el torso desnudo desplegó una silla de playa y se recostó sobre ella. A su lado, su amigo simulaba untarle un protector solar.
Pero qué gente ingeniosa. Cómo se pasan.
"Este fenómeno tiene lugar a raíz del choque de un frente frío con la magia de los ancestros!! ¡¡Chaka Uga Maga Booga Chaka Uh!!"
Un vocero del Servicio Meteorológico dijo que el fenómeno era "casi un milagro", me gusta imaginar que luciendo sus mejores plumas y su máscara ceremonial nueva, al tiempo que sacudía eufórico su cetro de poder.
Alguno acaso podría calzarse la corbata de hacer observaciones suspicaces y decir que soy un amargo, que qué problema tengo con la gente que festeja ante el inusual prodigio, y que mi actitud es bien cosa de uruguayito resentido porque acá nunca pasa nada ni remotamente parecido. Bueno, lo que tengo para responder es que in your face, loser!! >:(, porque viene resultando que en Uruguay también nevó, así que chupen giles.
Desde luego, como es habitual con todo lo que sucede acá, nadie se dio por enterado porque el fenómeno se manifestó en un pueblucho de mala muerte perdido en el medio del campo y duró una media horita. Por suerte algunos cronistas periodísticos estaban atentos y no perdieron tiempo en documentarlo todo con lujo de detalles ...
El fenómeno meteorológico ocurrió alrededor de las 7 de la tarde. Ya las calles de la ciudad habían sido devoradas por la oscuridad y circulando por ellas no andaba ni un alma. Es que según el servicio meteorológico fue una de las tardes más frías del año y mientras los vecinos miraban en la tele los informativos que desde Argentina mostraban un paisaje totalmente blanco en lugares donde era impensado ver nieve, a uno se le ocurrió mirar por la ventana. "Miren, acá también está nevando". A partir de allí fue una fiesta y en pocos minutos la ciudad de Nueva Palmira se vio con sus calles llenas de gente mirando el fenómeno y con las palmas de sus manos hacia arriba, tratando de atajar alguno de los enormes copos que se desprendían del cielo.
No hay caso, por más que intento verlo como una celebración, no puedo sacarme de la cabeza la idea de una caricatura deplorable (más deplorable todavía) del circo que se armó en Buenos Aires. La imagen de los ciudadanos de Nueva Palmira con las manos alzadas y la boca abierta con su mejor cara de feliz cumpleños me remite a un grupo de cavernícolas que ven prenderse una lamparita.
Por otra parte, debo corregirme porque dije que la nevada sólo duró media hora, y según el cronista de La República "se extendió por más de media hora". Presumiblemente unos treinta y cinco minutos. O capaz que treinta y seis.
Como los meteorólogos uruguayos estaban ocupados mirando la nevada de Buenos Aires por Crónica TV no se pudo contar con ellos para que hablaran sobre la versión charrúa; pero que se vayan a lavar el orto, Colonia no los necesita porque tiene sus propios especialistas que sí estaban disponibles para hacer un análisis tan profesional y didáctico como el que más: "'El agujero que queda cerrando el pulgar y el índice', explicó uno de los vecinos para graficar la dimensión de los copos que caían sobre la carrocería de su auto."
El periodista Washington Fernández, al igual que hicieron los argentinos, "sacó algunas fotos para registrar este acontecimiento climático". En efecto, véase qué belleza ...
ó_Ò
Este tipo de esplendorosas imágenes son las que hacen que valga la pena estar vivo. Definitivamente no tenemos nada que envidiarle a esos porteños jetones. Y no, no es una foto que se manchó con hipoclorito de sodio. Mirá que son mala leche, loco...
...
Perdón, me quedé colgado mirando la imagen. Por el amor de Dios, es la cosa más triste que haya visto en mi vida. Y encima es en blanco y negro. Chau, me voy a llorar a la placita.
Antes de irme, quiero decir que la ONU podría dejar de rascarse y hablar pelotudeces, y podría ponerse a hacer algo útil; como por ejemplo inventar una especie de unidad de terapeutas de naciones. Como los cascos azules, pero con psicólogos. El complejo de inferioridad del Uruguay ya está tomando ribetes dramáticos
¡FALSO HUSKY MUERE DE ARDORRRR!
La nieve trajo desgracia al mejor amigo del hombre. El Cacho, nativo de Nueva Palmira, se pasa de ocurrente y embadurna en cal al Rocky (cruza de cruza de marcaperro). A los 32 minutos sale el sol y la historia no termina bien.
Interlunio, corresponsal de RANT en Nueva Palmira
(casi Alaska, che)
Etiquetas: æclipse µattaru, sociedad
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